Jesús que está en los cielos

Samuel llegó de visita. Estaba preocupado porque no encontraba un empleo.

Lo atendí en el patio desde donde podía ver a los trabajadores que arreglaban el techo del garaje.

—Habla con Jesús —le dije.

—¿Cuál Jesús?

—El que está arriba —dije y apunté al cielo.

Me miró como si me estuviera burlando.

—¿De qué Jesús me habla este? —seguro pensó.

En ese instante Jesús perdió el equilibrio, hizo acrobacias en el aire y aterrizó sobre el césped.

—¡Llama al número de emergencia!  Diles que Jesús cayó de muy alto.