Dos helicópteros sobrevolaron el barrio en busca del malhechor. Los autos de la policía bloquearon algunas calles y sus sirenas se dejaron escuchar por largo rato. El tipo, en su huida, intentó ocultarse en el patio trasero de una casa. El dueño, a esa hora, cuidaba del jardín. El extraño llegó corriendo a la propiedad…
